Los errores que todo el mundo comete al preparar berenjenas rellenas
Los factores para sacarle provecho a este plato de temporada.
Las berenjenas rellenas se convirtieron en una comida versátil que se logra adaptar con facilidad a cualquier estilo de vida. Aunque a simple vista parezca un plato a prueba de errores, ya que a la hora de prepararlo se utilizan una gran variedad de alimentos para acompañarlo, los expertos en gastronomía aseguran que todo el mundo suele pasar por alto en la receta algunos factores que podrían consagrarlo como una verdadero manjar culinario.
El error más común que cometen las personas al preparar berenjenas rellenas es colocarles bastante cantidad de sal con el fin de eliminar el sabor amargo que las caracteriza y la humedad que contienen. Los cocineros profesionales aseguran que este paso es innecesario, ya que se va a reducir al cocinarse junto con los otros ingredientes que componen la receta.
Por otro lado, los expertos en gastronomía aseguran que este vegetal morado funciona como una esponja, es decir que absorbe los condimentos que se le colocan, entre ellas el aceite. Lo mejor es controlar las medidas para evitar que se torne un plato grasoso y muy calórico.
Aunque las berenjenas rellenas suelen combinar muy bien con el queso, no hay necesidad de excederse con la cantidad, este ingrediente puede convertirse en la estrella de la receta en un abrir y cerrar de ojos, tapando cualquier otro alimento que intente robarle un poco de protagonismo.
El tamaño del vegetal también es un factor importante: los cocineros profesionales recomiendan utilizar una variedad pequeña, ya que suelen ser las más dulces en el mercado. Sin embargo, si se busca añadir mucho relleno, optar por las grandes va a ser lo más efectivo y práctico en la cocina.
