Croissants de hojaldre sin amasar y en pocos minutos, la receta perfecta para un resultado gourmet

El croissant de hojaldre es una de las recetas más básicas en el mundo de la repostería, pues se pueden agregar rellenos que sean del gusto de los comensales. Aunque parezca complicada, lo cierto es que existe una versión muy fácil de hacer, ideal para aquellos que dan sus primeros pasos en el mundo de la cocina.

Además, la masa de esta preparación se hace en sencillos pasos y sin dedicar tanto tiempo al amasado. El croissant de hojaldre es perfecto para servir como complemento en un postre, y con salsas o cremas frutales.

Los ingredientes para hacer el croissant de hojaldre:

• 250 g de harina de trigo común (2 tazas)
• 155 ml de agua (1/2 taza)
• 180 g de mantequilla (3/4 tazas)
• ½  cdta. de sal
• Harina para espolvorear

Lo primero que se debe hacer es colocar en un bowl todos los ingredientes, y amasarlos con ayuda de una paleta hasta crear una preparación sin grumos. Luego, se lleva a una superficie plana espolvoreada con harina y se extiende con el palote, hasta obtener una forma rectangular.

Después, se hacen pliegues desde los extremos hacia el centro, para volver a extenderla en un rectángulo. Se tapa con papel film y se reserva en la heladera por 30 minutos.

Una vez transcurrido el tiempo, se estira por última vez para cortar en forma de triangulo, se enrolla, y se pinta la superficie con leche o huevo. Para la cocción se precalienta el horno a 200 °C y se cocina por 20 minutos.

Cuando ya estén doradas, se podrán retirar del horno y dejar enfriar para rellenar con dulce de leche, chocolate, o crema pastelera y espolvorear con harina. Además, es un gran platillo para servir a la hora de la merienda con alguna bebida caliente: mate, café, o té.