Se divorcia y lo espera lejos de España: el drama de la Infanta Cristina

Todo comenzó a gestarse hace unos días cuando cumplió los 55 años y llegó el momento más difícil de todo aniversario marcado con tinta indeleble por un año complicado: hablamos de la Infanta Cristina.

La Infanta Cristina sabe que la relación con Iñaki Urdanagarin está terminada: pese a que no le quedan muchos meses más en la prisión de Brieva, en Ávila, el divorcio ya está en marcha.

La noticia que habría devastado a la Infanta Cristina dándole comienzo a un año signado por el drama son los 15 de su hija Irene y la imposibilidad de ver a su padre y el rechazo explícito de la Princesa Leonor.

Cada día más sola, la Infanta Cristina no ha podido encausar la relación con la Casa Real y Lisboa vuelve a aparecer como el nuevo destino para ella y sus hijos, pero un dato nuevo sale a la luz.

Pero a último momento todo podría cambiar: la Infanta Cristina sufre cada día más por lo que hace algunos meses empezó como una investigación y ahora se puso serio y contra las cuerdas a su propio padre Juan Carlos.

La Infanta Cristina, de acuerdo a las informaciones que llegan desde Ginebra, Suiza, publicadas por El Confidencial, estaría dispuesta a esperar a su padre para alojarlo en caso de que se inclinara por el exilio.

Es muy probable que el emérito haga las maletas y deje España para vivir exiliado en el Caribe: la República Dominicana figuraba como el principal destino, la opción de mudarse a Sanxenxo, en Galicia, es posible, pero cuanto más lejos esté de las fronteras más se descomprimirá la situación de la Casa Real.

Es en este contexto que mudarse con la Infanta Cristina, quien ha comprado una nueva casona en Suiza: con las puertas cerradas para Iñaki, se abren para Juan Carlos. En el emérito queda definir dónde pasa la investigación que tiene un escenario temido: el banquillo.