Japón

La princesa Mako de Japón renunció a su título y rompió los lazos con la familia imperial

Se estima que la princesa Mako se establecerá definitivamente en Estados Unidos.
martes, 26 de octubre de 2021 · 15:03

Después de años de controversias, la princesa Mako de Japón abandonó por fin su título y su lugar dentro de la familia imperial. La causa: decidió casarse con el plebeyo Kei Komuro, lo que significa la pérdida automática de su título.

La sobrina del emperador japonés Naruhito también fue la primera princesa del Japón de la posguerra en casarse sin la ceremonia tradicional y tampoco recibirá la abultada dote que le correspondía. La unión de la princesa Mako con Komuro se limitó a una sobria boda civil y a una correcta conferencia de prensa poco después.  

La exprincesa y Komuro se conocieron en la universidad.

"Para mí Kei es una persona imprescindible. Casarnos era la única opción que podíamos tomar para vivir siendo fieles", afirmó la joven que, de ahora en más, será conocida como Mako Komuro y ya no como princesa Mako.

"Amo a Mako. Quiero pasar mi vida con ella, con alguien a quien amo. Hasta ahora, hemos venido apoyándonos en los momentos felices y en los que no lo han sido tanto", aseveró, por su parte, su flamante esposo.

El único gesto afectivo que se vio en la jornada fue el abrazo entre la exprincesa y su hermana.

 

Ensañamiento de la prensa

Desde que la pareja anunció su compromiso en 2017, fueron el blanco preferido de la prensa de espectáculos japonesa y del sector más conservador del país asiático. Sobre todo, después de que saliera a la luz que la madre de Komuro, es decir, la suegra de la princesa, no había pagado la deuda de unos 35 mil dólares que había contraído con un antiguo prometido.

A causa del escándalo, decidieron atrasar su casamiento y Komuro se fue a estudiar derecho a Estados Unidos en 2018. El mes pasado volvió y se reanudaron, por fin, los planes de boda.

Debido a la presión de la prensa, Mako sufrió un complejo estrés postraumático.

 

Planes para el futuro

En Japón se especula que la flamante pareja, ambos de 30 años, se trasladará a Estados Unidos, aunque no de manera inmediata.

Las mujeres en Japón no pueden acceder al trono.

Mientras Komuro ya rindió un examen para ejercer la abogacía en Estados Unidos, todavía tienen que ultimarse detalles de la eventual mudanza. Por ejemplo, la exprincesa debe sacar el primer pasaporte de su vida, puesto que la familia imperial no necesita.

Por lo pronto, se desconoce qué hará Mako Komuro en su vida como plebeya, pero cualificaciones no le faltan: estudió Arte y Patrimonio Cultural y tiene una una maestría en Estudios Museísticos.