Estados Unidos aprueba el uso de la vacuna de Johnson & Johnson
Es el primer país del mundo en aceptar el antídoto de una sola dosis.
A la campaña nacional de vacunación contra el coronavirus en los Estados Unidos se le suma una nueva candidata que ayudará a agilizar el proceso de inmunización más importante en la historia del país de América del Norte. Se trata de la monodosis de la fabricante estadounidense Johnson & Johnson que fue recientemente aprobada para su uso de emergencia por el Máximo Regulador de Alimentos y Medicamentos (FDA) de la nación.
Con esta nueva adquisición, Estados Unidos no solo pasa a ser el primer país del mundo en aceptar un antígeno de una sola dosis de los laboratorios Johnson, sino que, además, refuerza su campaña de inmunización nacional con tres productos en sus filas de antídotos, contando a las candidatas de Pfizer y Moderna, todas de fabricación nacional y de las más importantes en el mercado de las vacunas contra la COVID 19.
La decisión de aceptar la vacuna de Johnson & Johnson llega a pocos días de que EE. UU. superara la meta de inocular a 50 millones de personas y se espera que con la nueva aprobación se pueda sobrepasar esta cifra antes de que termine el mes de marzo. La FDA consintió que el fármaco de la fabricante estadounidense se aplique en personas mayores de 18 años, ya que según los datos suministrados al organismo, la dosis unitaria demostró eficacia para reducir la incidencia del virus en los pacientes voluntarios que participaron en los ensayos médicos, es decir, tiene una alta probabilidad de prevenir el virus y sus complicaciones graves o moderadas.
Otra de las diferencias más relevantes del fármaco de Johnson es que no amerita conservación en un ambiente ultrafrío y que, en comparación con sus rivales del mercado, puede ser más fácil de adquirir y almacenar. La corporación estadounidense se comprometió a garantizar unos 100 millones de antídotos antes de finalizar el segundo trimestre del año 2021, con lo que se podría garantizar el total de los medicamentos para la población estadounidense entre junio y julio, tomando en cuenta las 600 millones de vacunas que Pfizer y Moderna deberán garantizar en el mismo plazo.
Es importante destacar que los Estados Unidos no solo ostentan el título del país con mayor incidencia del virus en todo el mundo, con sus 28,6 millones de infecciones y 512 mil fallecimientos, sino que también son la nación donde más vacunas se han aplicado. Conforme con los datos suministrados por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) del país, hasta este sábado, las autoridades sanitarias habían recibido más de 96 millones de vacunas entre las de Pfizer y Moderna, de las cuales se han aplicado unas 72 millones de dosis, aproximadamente.
