Desgarrador: cientos de padres marroquíes angustiados buscan a sus hijos en Ceuta
España negocia con Marruecos el encuentro de los niños con sus familias.
Tras cinco días de la repentina avalancha migratoria en las costas del enclave costero español de Ceuta, el Gobierno nacional ha logrado expulsar de su territorio a la gran mayoría de inmigrantes que irrumpieron entre el lunes y el martes en las fronteras de la península ibérica, pero todavía quedan dudas en el aire. ¿Qué pasará con los más de 1.500 menores de edad que llegaron nadando desesperadamente al país? ¿España los repatriará o podrán permanecer en la nación? ¿Dónde están los padres de todos estos niños?
Esta última interrogante, al parecer, tiene una respuesta bastante escalofriante y es que, según el Gobierno autónomo del enclave costero, en los últimos dos días las autoridades migratorias han recibido más de 4.400 llamadas telefónicas de padres marroquíes desesperados que intentan ubicar a sus hijos entre los menores aislados en España.
Víctimas de un engaño
De acuerdo con la propia presidenta del enclave autónomo español, Mabel Deu, los más de 1.500 niños que ingresaron a Ceuta después de nadar más de 14 kilómetros desde Marruecos “fueron supuestamente engañados para irrumpir en el país con la promesa de que podrían ver a Cristiano Ronaldo".
Expusieron sus vidas con un oscuro propósito que desconocemos. Los utilizaron de carnada, enviándolos a cruzar nadando el peligroso estrecho de Gibraltar y se lo ocultaron a sus padres. Haremos todo lo posible por reunir a estos padres con sus hijos.
La mandataria ha informado que se ha iniciado un proceso de identificación tanto de los padres como de los infantes presentes en Ceuta y Melilla para poder negociar con Marruecos un permiso extraordinario para que estos padres crucen personalmente las fronteras y busquen a sus hijos, pero todavía el Gobierno marroquí no ha dado respuestas.
Hasta el momento, el Gobierno español ha repatriado al menos 6.600 marroquíes de los 8.000 que ingresaron a Ceuta a principios de semana. En el caso de los niños, las devoluciones son ilegales porque transgreden y violentan una veintena de leyes internacionales sobre los derechos humanos de los infantes.
