A 11 años del milagroso rescate de los mineros de Chile, una historia de lucha y supervivencia

Pasaron más de dos meses sepultados en las entrañas de la tierra.
jueves, 5 de agosto de 2021 · 17:35

5 de agosto del 2010, una fecha que quedó marcada en la memoria colectiva de Chile como el día en el que una mina de cobre y oro se vino abajo de forma parcial y sepultó con vida a unos 33 mineros de entre 19 y 60 años, que se encontraban dentro del yacimiento mineral.

El derrumbe de la mina de San José, en pleno desierto de Atacama, fue un acontecimiento que paralizó por completo al país y que acaparó los titulares de la prensa nacional e internacional por más de dos meses, tiempo que demoraron las labores de búsqueda y rescate. 

La mina fue clausurada tras el incidente.

Hoy, cuando se cumplen 11 meses de este suceso, Chile aún recuerda con nostalgia los 70 días de angustia y zozobra que tuvieron que enfrentar estos 33 hombres y sus respectivas familias, durante las amargas semanas que demoró el rescate

 

Accidente en el yacimiento de Atacama

El colapso de la mina de cobre ocurrió poco después del mediodía, justo cuando los 33 mineros se encontraban en su hora de descanso en un lugar llamado “el refugio”, una pequeña cabaña de bloques y madera ubicada en las entrañas de la tierra, a unos 700 metros bajo el nivel de la superficie

Más de 2.000 efectivos trabajaron en las labores de rescate.

Al momento del derrumbe, las autoridades desconocían la magnitud de los daños y no se sabía con exactitud cuántos mineros estaban atrapados; al principio se hablaba de 25 personas sepultadas, pero con el paso de los días se confirmaron que eran 33 hombres, un boliviano y 32 chilenos, según lo que reseñaron los medios de comunicación.

Pasaron 17 días para ser descubiertos con vida, gracias al ingenio de uno de los mineros que escribió en un papel su ubicación y el estado de los 33 trabajadores; aunque todavía tuvieron que esperar varias semanas más para ser rescatados. 

El Gobierno de Estados Unidos e Israel colaboraron en las labores de rescate de los mineros.

 

Trabajos de extracción

Para traerlos de vuelta a la superficie se utilizó un cilindro de metal de 51 centímetros de ancho, bautizado con el nombre Fénix 2, en referencia al ave de la mitología griega que representa larga vida y regeneración de las cenizas. La construcción de esta cabina de transporte estuvo a cargo de decenas de ingenieros de Chile y la Nasa.

Para sobrevivir a los 70 días que estuvieron bajo tierra, los 33 mineros se alimentaron solo con dos cucharadas de atún y medio vaso de leche cada 48 horas, tiempo suficiente para que el organismo no colapsara por inanición.

La capsula de rescate fue donada a un museo en Atacama.

Se enfrentaron a condiciones climáticas extremas, ya que el accidente ocurrió en plena época invernal en Chile. Durante esta temporada del año, el desierto de Atacama suele ser radical con las temperaturas, el termómetro puede variar de cero grados en la madrugada a 40° en la tarde. Y aunado a esto, estuvieron todo este tiempo sin luz solar, sin agua, sin electricidad y con escasa ventilación de aire, lo que extremó mucho más su estadía en la mina

Los mineros de Chile son famosos y reconocidos a nivel mundial.

Pese a todo esto y contra todo pronóstico, los 33 mineros lograron sobrevivir y fueron rescatados uno a uno por los equipos de rescate, convirtiéndose en héroes para el país y en íconos de lucha y supervivencia a nivel mundial.

Viajaron a través del mundo para narrar los detalles de su historia y hasta firmaron un acuerdo para filmar una película llamada “Los 33”. Las labores de rescate fueron seguidas vía streaming por 1.000 millones de internautas.