Los incendios forestales en Grecia calcinan al menos 50 mil hectáreas de bosque

Las autoridades han evacuado a cientos de personas de la isla de Evia.
domingo, 8 de agosto de 2021 · 19:38

Arrecian los incendios forestales en Grecia por decimosegundo día consecutivo: de los más de 500 focos incendiarios que se han declarado en toda la geografía griega en las últimas dos semanas, al menos tres son de alta preocupación para las autoridades: uno de ellos arde en la isla de Evia (al este del país), el otro en la península de Peloponeso y el tercero en las puertas de Atenas, capital griega.

En la isla griega de Evia, la segunda más grande del país helénico, las autoridades han tenido que evacuar a los pobladores a través de ferrys, dada la magnitud de las llamas y la imposibilidad de poder avanzar con la contención de fuego vía aérea. Las llamas consumen todo a su paso y la visibilidad para las aeronaves es cada vez más escasa, solo en esta región 40 poblaciones se han visto afectadas por el fuego.

En lo que va de jornada, unos 600 habitantes de esta región han sido desalojados de la isla de Evia. 

En Grecia continental, los miembros de la unidad militar de emergencias, junto al cuerpo de bomberos de Atenas y un avión anfibio enviado por el Gobierno de España lograron contener casi en su totalidad un intenso siniestro que amenazaba con destruir las ruinas del Olimpo, la famosa infraestructura griega que atrae a miles de turistas cada año. 

 

El balance de los daños

Se calcula que solo en los suburbios de Atenas se han quemado hasta 7.000 hectáreas de bosque forestal, muchas de estas de la reserva natural del Monte Olimpo. Sin embargo, el balance preliminar de los siniestros a nivel nacional asciende a unas 50.000 hectáreas calcinadas, según cálculos del Ministerio de Agricultura y Tierra de Grecia.

El Gobierno prometió ayudar a los afectados. 

De acuerdo con la agencia de noticias EFE, los incendios forestales ya se han cobrado la vida de una persona, un bombero que se encontraba en el cumplimiento de su deber, mientras que las pérdidas generadas a la infraestructura son incalculables.