Exigen a la Corte Suprema británica un referéndum sobre la independencia escocesa

La Corte Suprema del Reino Unido fue exigida para aprobar la realización de un referéndum sobre la independencia de Escocia en 2023. Según Dorothy Bain, la Lord Advocate y una de las principales oficiales de la ley del país británico, los escoceses votan constantemente por candidatos independentistas, por lo que el parlamento local debería poder organizar esas elecciones sin la necesidad de ser aprobado por el gobierno central.

“Esta es una situación que invitamos a la corte que la resuelva finalmente, ya que se trata de un asunto de excepcional importancia pública para el pueblo de Escocia y del Reino Unido”, afirmó Bain. A su vez, agregó que es un tema “central para el manifiesto de compromiso que es respaldado por la población". Tres primeros ministros británicos conservadores se negaron a autorizar un referéndum de manera consecutiva, luego de que fallara el del 2014, que se realizó pocos años antes del inicio del brexit, cuando los resultados fueron de un 55% a favor de continuar como parte de Gran Bretaña contra un 45% a favor de la independencia.

Según Bain, el referéndum presentado sería puramente consultivo, entonces no ataría al parlamento británico a actuar con base en la elección de Escocia, sino que serviría como una encuesta de opinión llevada a cabo por el gobierno local. De acuerdo con una carta que había enviado a la Corte Suprema a principios de julio, ella había afirmado que entendía que el gobierno de Glasgow no tenía “la autoridad de ejecutar una orden para disolver a la Unión”, pero sí concluye que “un referéndum no necesariamente se relaciona con esa situación”.

Los problemas del referéndum

A pesar de que fue rechazado por el gobierno central británico en tres ocasiones durante los últimos años, no todos los escoceses coinciden en que es la mejor opción y algunos expertos aseveran que la administración de Nicola Sturgeon puede encontrarse con problemas para ganarse a gran parte de la población.

Los principales focos de campaña que buscará la política independentista están formados alrededor de los malos resultados económicos del gobierno de Liz Truss, acompañado de la figura negativa que es Boris Johnson en la región del norte de Gran Bretaña, donde los “tory” suelen tener problemas para ganar votos.

Según estudios, la situación de la independencia escocesa se encuentra separada casi en un 50/50, por lo cual el partido de Sturgeon deberá trabajar duramente para intentar ganarse los votos que quedan en el aire y así asegurar que el referéndum resulte a favor de la independencia, como presentar modelos económicos y políticos que seguiría el nuevo gobierno en caso de abandonar a la Unión.