Un terremoto golpea con dureza a Indonesia y deja varias víctimas

Al menos 268 personas fallecieron y más de 1.000 resultaron heridas luego de que un potente terremoto golpeara con fuerza en el oeste de la Isla de Java, en Indonesia. Se registró una magnitud de 5.6 en la escala Richter, pero solo 10 kilómetros por debajo de la tierra. De acuerdo con la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres, 22.000 casas fueron destruidas, 58.000 ciudadanos fueron desplazados de sus hogares y al menos 151 continúan desaparecidos.

El terremoto comenzó en las cercanías del pueblo de Cianjur, en Java, una de las islas principales que conforma Indonesia. Debido a los temblores, hubo muchos desprendimientos del suelo, lo que generó deslices que arrasaron con varios pueblos de la zona y afectó, sobre todo, a trabajadores y jóvenes, dado que ocurrió a las 13:00 de la tarde (horario local).

Joko Widodo, presidente del último país anfitrión del G20, remarcó que su instrucción principal a las autoridades es la de “priorizar el salvataje de las víctimas que continúan bajo los escombros''. Además, destacó que van a buscar una forma de recompensar a los pueblos de Indonesia que se vieron afectados por los temblores. Por su ubicación en el anillo de fuego en el Pacífico, los terremotos son comunes en esa zona, y uno de los más devastadores fue en el 2018, cuando más de 2.000 personas fallecieron en la isla de Sulawesi.

Las dificultades

Una de las complicaciones para poder realizar el rescate es que la zona afectada es una cuya población está muy distanciada, debido a las condiciones geográficas de la isla. Eso complica aún más las labores del equipo a cargo.

Según Henri Alfiandi, jefe de la Agencia Nacional de Búsqueda y Rescates de la nación asiática, “el reto es que la zona afectada está dispersa, además de que los caminos hacia los pueblos se encuentran dañados”.

Asimismo, muchos de los hogares de la isla no estaban preparados, por lo cual, el presidente Widodo pidió que durante la reconstrucción se incluyeran viviendas a prueba de terremotos para evitar catástrofes a futuro.