Brasil

Esclavitud en Brasil en el siglo XXI: así justificó no pagarle a su empleada durante 50 años

Durante décadas, una familia maltrató a Madalena da Silva, no le pagó ningún salario y hasta le robó.
martes, 3 de mayo de 2022 · 10:02

Un caso escandalizó a Brasil en la última semana. Se trata del de Madalena Santiago da Silva, quien pasó 54 de sus 62 años como empleada doméstica en la casa de una familia en condiciones análogas a la esclavitud y que fue rescatada el año pasado. Hoy, se supo cuál fue el argumento que usó su expatrona en su testimonio ante el Ministerio de Trabajo.

Según informó la auditora fiscal del trabajo del país vecino, Liane Durão, la ex “empleadora” Sonia Seixas Leal aseveró que no le pagaba a Da Silva un salario porque la consideraba “como una hermana” y como “parte de la familia”. Para el Sindicato de Trabajadores Domésticos de Bahía (estado al noreste de Brasil donde ocurrió el caso), esta explicación es inaceptable.

Madalena Santiago da Silva.

Es una forma que el empleador usa para no garantizar los derechos de la empleada doméstica. Esa trabajadora no es de la familia, ella está vendiendo su mano de obra para una persona que precisa el servicio”, explicó la presidenta del sindicato, Creuza Oliveira, citada por el medio G1 de Brasil.

“Si fuese de la familia, tendría derecho a la herencia, tendría derecho a usar el ascensor social, la piscina, a ir a la facultad y estudiar, como hace la familia”, continuó Oliveira. Madalena Santiago da Silva no solo no podía hacer ninguna de esas cosas, sino que sufría maltratos y tiene grandes daños psicológicos.

La presidenta del Sindicato de Trabajadores Domésticos de Bahía.

 

El caso que angustió a Brasil

A pesar de que la esclavitud fue abolida en el gigante sudamericano en 1888, 3.451 personas fueron rescatadas de condiciones de trabajo similares a este régimen desde 1995. Este fenómeno, además, está muy ligado a cuestiones raciales: el 88,6% de las empleadas domésticas en Brasil son afrodescendientes.

Esta semana, el testimonio de Da Silva angustió al país al decir entre lágrimas que le daba miedo darle la mano a una periodista blanca de TV Bahía: “Tengo miedo de tomar su mano blanca. Veo su mano blanca y si pongo mi mano negra encima me parece feo”.

Madalena da Silva, junto a la periodista de TV Bahía.

Además de la falta de salario, los malos tratos y el daño psicológico, la familia también le robó a Da Silva. La hija de los patrones no solamente tomó préstamos a su nombre, sino que se quedó con 20 mil reales de su jubilación. Ahora, Madalena Santiago da Silva intenta rehacer su vida, pero cuántas más como ella todavía existen en Brasil.