Una foto habría motivado el homicidio de Pereira y Phillips, según la fiscalía de Brasil

El Ministerio Público Federal (fiscalía) de Brasil informó hoy que había denunciado formalmente a los tres sospechosos por asesinar al indigenista brasileño, Bruno Pereira, y al periodista británico, Dom Phillips, a principios de junio en la Amazonía. Además, por primera vez, se deslizó cuál habría sido el desencadenante del crimen.

“Lo que motivó los asesinatos fue el hecho de que Bruno le pidió a Dom fotografiar el barco de los acusados, algo que es calificado por la fiscalía como motivo fútil y puede agravar la pena”, indicaron las autoridades del país vecino en un comunicado. De acuerdo a estas informaciones, Pereira, uno de los indigenistas más respetados de Brasil, murió como resultado de tres disparos, los cuales recibió sin posibilidad de defenderse.

Por su parte, Phillips “murió solo por estar con Bruno, para poder asegurar la impunidad del otro crimen”, señaló la fiscalía de Brasil. No obstante, los responsables fueron identificados y detenidos, y hoy fueron denunciados formalmente por “doble homicidio calificado” y “ocultamiento de cadáver”.

Dos de ellos, Amarildo da Costa Oliveira y Jefferson da Silva Lima confesaron el crimen, mientras que la participación de Oseney da Costa de Oliveira (hermano del primero) fue comprobada por las declaraciones de testigos. A principios de julio, se había detenido a un cuarto sospechoso, que habría ordenado el homicidio, pero eso no consta en la denuncia de hoy.

Cruces previos

En el Valle del Javarí, esta zona remota de la Amazonía, ubicado en la zona fronteriza entre Brasil, Perú y Colombia, el negocio de la pesca ilegal se mezcla con el narcotráfico y demás negocios ilícitos. Los detenidos, justamente, formaban parte de un grupo de pescadores ilegales de pirarucú (un enorme pez cuyo consumo en esta región está reservado para las comunidades indígenas).

Pereira formaba parte del equipo de vigilancia que la Unión de Indígenas del Valle del Javarí había montado para fiscalizar la presencia de pescadores ilegales en la tierra indígena y en los alrededores. En este contexto, Pereira ya habría tenido cruces con Amarildo da Costa Oliveira.

Semanas antes del crimen, en un audio de mayo dado a conocer por la prensa del gigante sudamericano, Pereira denunciaba que pescadores ilegales de la zona habían disparado a los equipos de fiscalización de la región.

Debido a lo profundo del conflicto, las autoridades de Brasil todavía no descartan que haya sido alguien más el que ordenó el asesinato de Pereira y Phillips, como sostienen las agrupaciones indígenas, pero esto todavía no pudo confirmarse.