El SMN decretó alerta meteorológica para doce provincias

El SMN (Servicio Meteorológico Nacional), advirtió que durante la jornada de este jueves se presentarán lluvias de variada intensidad, tormentas y granizo en gran parte del territorio nacional.

A razón de ello, el organismo emitió una alerta amarilla que alcanza a doce provincias: Buenos Aires, Chaco, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, La Pampa, Mendoza, Misiones, Río Negro, San Luis, Chubut y Santa Fe. Igualmente, el SMN realizó una serie de recomendaciones para mantener a la población segura.

Desde el SMN explicaron que la alerta nivel amarillo implica “posibles fenómenos meteorológicos con capacidad de daño y riesgo de interrupción momentánea de actividades cotidianas”.

Las zonas en las que rige la advertencia serán afectadas por “tormentas, algunas localmente fuertes, que podrán estar acompañadas por ráfagas intensas, importante actividad eléctrica, ocasional caída de granizo y principalmente abundante caída de agua en cortos períodos".

Asimismo, el organismo indicó que se esperan valores de precipitación acumulada entre 30 y 70 mm, que pueden ser superados en forma puntual. En ese sentido, recomiendan no sacar la basura, evitar actividades al aire libre, no refugiarse cerca de árboles y postes de electricidad que puedan caerse.

Además, para minimizar el riesgo de ser alcanzado por un rayo, no se debe permanecer en playas, ríos, lagunas o piletas. Lo más importante es mantenerse en un lugar seguro el tiempo que dure la alerta y mantenerse atento a los comunicados oficiales de las autoridades.

Se estima que las precipitaciones se intensificarán especialmente en horas de la tarde. Asimismo, se pronostican lluvias durante el fin de semana con una temperatura entre los 18 y 29 grados, para el caso de la provincia de Buenos Aires.

Alerta por viento zonda en Mendoza

El organismo también emitió una alerta amarilla por viento zonda en la provincia de Mendoza. De acuerdo con el pronóstico, los vientos podrían alcanzar velocidades de entre 30 y 50 km/h, y ráfagas de alrededor de 70 km/h.

Al respecto, explicaron que “este tipo de fenómeno puede provocar reducción de la visibilidad, aumento de temperaturas repentino y condiciones de humedad relativa muy baja, por lo que se recomienda mantener los cuidados”.

Entre ellos, “asegurar los elementos que puedan volarse, mantenerse alejado de los árboles, ya que la fuerza del viento podría quebrar alguna de sus ramas. No estacionar los vehículos bajo los árboles y mantener cerradas las casas de la manera más hermética posible”.