Había más de 100 personas: la Policía de Neuquén desarticuló una fiesta clandestina

Cerca de las 03:00 de la madrugada de este domingo, 31 de octubre, la Policía de Neuquén desarticuló una fiesta clandestina, que fue alertada por residentes del barrio La Roca, ubicado en la capital provincial, debido al sonido muy elevado de música y la alta concurrencia que pudieron observar.

Los efectivos de la fuerza provincial, que cumplen funciones en la sede policial Nº 21 sita en la vecindad Melipal, se presentaron en el lugar y verificaron que en la celebración ilegal había más de 100 personas en el patio de la vivienda, además de bebidas y luces instaladas para ambientar la fiesta.  La Policía de Neuquén entrevistó al organizador y le advirtió sobre las irregularidades.

Los jóvenes no solo no querían abandonar el lugar, sino que empezaron a atacar a los uniformados de la Policía de Neuquén, quienes tuvieron que pedir de emergencia más patrulleros de apoyo. Ante tal agresión, intervino la división de Seguridad Metropolitana, que estaban justamente en el lugar para ayudar. Tuvieron que usar sus armas reglamentarias, con fines disuasivos. 

Un antecedente similar con ataques hacia la Policía de Neuquén

El pasado 31 de agosto trascendió públicamente que el domingo 29 de ese mes, en Plaza Huincul (ubicada a 115 kilómetros aproximadamente de la ciudad capital), un evento similar reunió a más de un centenar de jóvenes. El personal de la institución policial neuquina se hizo presente en la intersección de las calles Chile y Formosa, del barrio Otaño, y en la ocasión también se dieron disturbios, ya que los asistentes empezaron a arrojar piedras contra los efectivos.

En la ocasión, una vez que lograron vaciar la propiedad, el personal de la Policía de Neuquén labró las actas de infracción correspondientes. En ese momento, todavía las restricciones eran mayores, puesto que en casas particulares solo se permitían reuniones de hasta diez personas.