El EPAS informó que las plantas de líquidos cloacales operan bajo las normas vigentes

Luego de diferentes denuncias por parte de los vecinos y advertencias de organismo gubernamentales por la contaminación en el río Neuquén, el Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) emitió un comunicado. En el documento, la institución asegura que sus plantas cumplen con las normativas para operar.

"El organismo posee tres plantas de tratamiento en la ciudad. Actualmente las tres están funcionando en óptimas condiciones, vertiendo los líquidos según parámetros regidos por la ley 899”, indica el comunicado difundido por el organismo.

Desde EPAS, dependiente de la Secretaría de Gestión y Servicios Públicos provincial, aseguran que las plantas de tratamientos de líquidos cloacales funcionan en parámetros normales.

“Nosotros trabajamos cumpliendo los parámetros que se establecen en normas provinciales y nacionales. Somos un ente comprometido con el medio ambiente”, afirma en el documento el gerente general de Servicios Neuquén, Esteban Rodríguez.

Según explicó el funcionario del EPAS, el ente lleva adelante controles diarios y, además, son auditados por organismos externos que garantizan que la institución no está “comprometiendo a la población”.

"Existen distintos organismos de contralor que realizan análisis en forma independiente y permanente para garantizar la calidad del líquido vertido sobre un espejo de agua", detalla el comunicado de la empresa estatal.

En tanto, el gerente de Saneamiento de la ciudad, Pablo Morales, recorrió la planta en el Parque Industrial de Neuquén y destacó el trabajo del personal. “Ellos son los responsables de que las plantas funcionen bajo estos parámetros”, aseguró.

Vecinos de Centenario efectuaron una denuncia por contaminación en el río Neuquén

Vecinos de Centenario llevaron adelante una denuncia en la Justicia Federal, el viernes pasado, por la situación que se vive en el río Neuquén. Desde hace meses, hay contaminación en el lugar y aseguran que se vierten líquidos cloacales crudos y sin tratar.

La planta cuenta con una autorización para verter líquidos, con previo tratamiento clorificado, hasta que se termine la obra que se inició en marzo de este año. Funcionarios neuquinos aseguran que el agua está contaminada.