La Iglesia criticó la adhesión de la Ciudad de Buenos Aires al protocolo nacional de interrupción del embarazo
El Arzobispado se mostró disconforme por la aprobación y se manifestó mediante una carta.
El jueves, la Legislatura porteña aprobó la adhesión de la ciudad de Buenos Aires al protocolo nacional de interrupción legal del embarazo y desató la disconformidad de La Iglesia. "Este protocolo contradice las garantías constitucionales a favor de la vida más desprotegida: la de un ser humano por nacer", manifestaron.
"¿Quién puede festejar esta aprobación? La interrupción se convirtió en ley, pero sigue siendo un eufemismo, y todos sabemos de qué se trata”, agregó la congregación.
La comunidad eclesiástica aclaró que "no están en contra de los derechos de las mujeres". "Estamos a favor de la vida como viene, en toda circunstancia, aun en medio de la pandemia, en los barrios más humildes. "¡Sí, a la vida; sí, a las dos vidas!”.
"Cuando se niega el derecho más elemental –el derecho a vivir– todos los derechos humanos quedan colgados de un hilo. Sin vida, no hay libertad”, sostuvo el Arzobispado.
La carta fue firmada por diferentes figuras del clérigo: los monseñores Joaquín Sucunza, Enrique Eguía Seguí, Alejandro Giorgi, Ernesto Giobando SJ, Juan Carlos Ares, José María Baliña y Gustavo Carrara y Mario Poli, arzobispo de Buenos Aires.
"Nos lastima y duele, que en medio de un letal contagio, donde tantos agentes sanitarios y servidores esenciales exponen y arriesgan su vida para salvar la del semejante, los legisladores vean oportuno avanzar en una ley", expresaron desde la congregación.
Ayer, la aprobación recibió 50 votos a favor, 7 en contra y 3 abstenciones. En dicha sesión participaron los representantes de cada bloque político y el Arzobispado criticó la opinión de algunos dirigentes.
“Comprendemos que está en juego la salud, pero también comprendemos que la salud no se puede alcanzar descartando a otro ser humano", dijeron desde La Iglesia Católica.
