Sin respuesta: estudiantes de odontología exigen poder recibirse
Son 28 alumnos de la Universidad de Río Negro.
El coronavirus alteró todos los planes previstos para este año, principalmente, en el ámbito académico donde el regreso a la normalidad y a las clases presenciales se ve cada vez más lejano.
Sin embargo, es necesario que las autoridades evalúen el panorama alterado por el coronavirus, contemplen las distintas alternativas y brinden respuestas para todos los alumnos que están a la expectativa de poder continuar con su formación.
Respuestas, esto es lo que reclama un grupo de 28 estudiantes de odontología de la Universidad de Río Negro a quienes la pandemia les quitó la posibilidad de terminar sus estudios en tiempo y forma, pero, la falta de precisiones por parte de las autoridades les generó meses de incertidumbre.
Son solo 100 horas de prácticas profesionales las que no les permiten egresar y obtener su tan ansiado título de odontólogos. Dichas prácticas se encuentran suspendidas por tiempo indeterminado y, a pesar de su insistencia, las autoridades siguen sin darles ninguna respuesta.
Las idas y vueltas que tuvieron estos estudiantes fueron muchas: en abril presentaron la inquietud de cómo continuaría la cursada, hasta junio estuvieron realizando un trabajo de revisión bibliográfica, pero, después de eso, jamás recibieron soluciones.
Después de tantos meses, este grupo de alumnos reclama poder recibirse para insertarse en el sistema de salud y ejercer su profesión, sin realizar las prácticas, ya que, consideran que, tras haber realizado un total de 1.893 horas de trabajo en consultorio y teniendo el 97.3% de la carrera aprobada, están listos para avanzar.
"Ya hicimos todas las clínicas y todas las complejidades que te puede dar la carrera de grado, estas 200 horas son una formalidad para la inserción laboral, pero la modalidad que ellos nos planteaban, no nos insertaba en el mundo laboral", sentenciaron los jóvenes.
El reclamo es claro, estos 28 estudiantes necesitan ejercer su profesión y para ello necesitan que desde la UNRN, tanto la docente a cargo de las prácticas, como el rector, pasando por las autoridades de la carrera y de la universidad, tomen cartas en el asunto y le faciliten su derecho a trabajar.
