La actitud de un grupo de vecinos desató la indignación de Chubut

Un hecho repudiable desató la indignación de toda la comunidad de la provincia de Chubut. Un grupo de personas se divirtió con un ejemplar de una ballena jorobada sin vida, que quedó varada en la costa de Comodoro Rivadavia.

Sin pudor alguno, un grupo de vecinos se tomó fotos con el animal fallecido, incluso, hubo personas que ingresaron en el interior de la ballena o se posaron sobre su lomo y retrataron el momento. A medida que las lamentables postales circulaban por las redes, el rechazo de la provincia y el país fue inmediato.

Según reportaron medios chubutenses a Mejor Informado, el cetáceo se estancó en una orilla del kilómetro N° 8 de la costa de Comodoro Rivadavia y cuando las personas lo vieron, se acercaron para tomarlo como un juego. Así, niños, niñas, adultos y adultas se divirtieron con el cuerpo del animal fallecido.

Más allá de la actitud inapropiada e irrespetuosa de los vecinos y vecinas de la localidad de Chubut, también transgredieron todas las recomendaciones sanitarias que otorgó el Gobierno provincial. En tanto, las autoridades solicitaron a la población no acercarse al animal por el peligro biológico que esto conlleva para la salud humana. Podrían correr el riesgo de infección y el contagio de enfermedades.

Qué dice el pronunciamiento oficial de Fauna y Flora Silvestre de Chubut

A través de un parte de prensa, la Dirección de Fauna y Flora Silvestre de Chubut pidió que “ante el varamiento de un ejemplar juvenil de ballena jorobada, Megaptera novaeangliae, en las costas cercanas a la ciudad de Comodoro Rivadavia”, las personas “no se acerquen” al cuerpo del animal.

En las líneas siguientes, detallaron: ”Solicitamos que no toquen al cadáver, dado el peligro que representa como foco de infección, enfermedades y peligro biológico para la salud humana”.

También, en el documento, la Dirección de Fauna y Flora Silvestre de Chubut explicó que “se trata de un varamiento atípico para esta especie de ballena no frecuente en la zona”. Ante esto, sugirieron que “de querer observar al ejemplar, se lo haga a una distancia prudencial de 50 metros”.