Cuarentena del horror: se resistió a los tiros en un control vehicular y mató a un prefecto
Ocurrió en Puerto Deseado; el agresor fue abatido.
Puerto Deseado fue el centro del horror cuando el pasado viernes un joven de 21 años se resistió a los tiros en un control vehicular dispuesto por la cuarentena. Por el hecho falleció un prefecto y el propio agresor.
Según reconstruyeron medios locales, el enfrentamiento tuvo lugar en la calle Capitán Onetto, cuando el joven le disparó a quemarropa a un efectivo de Prefectura.
El atacante se llamaba Pedro Espinoza, mientras que el agente abatido fue identificado como Ricardo Soto.
Tras la agresión, Espinoza intentó evadir a la policía y huir hacia un gimnasio cercano, desde donde se enfrentó a tiros con el resto de las fuerzas de seguridad.
En declaraciones radiales, el intendente de Puerto Deseado, Gustavo González, relató que tras herir al prefecto, el joven “tomó a una persona de rehén” y continuó con la lluvia de balas hasta que “fue abatido”.
El prefecto asesinado era oriundo de la localidad de La Heras, y falleció en el Hospital Distrital de Puerto Deseado.
Tras los hechos, el intendente se lamentó: "Es el dolor más grande que tenemos, de una persona que estaba cumpliendo con su deber y que haya terminado de la manera en que terminó”.
